
Concurso IBAVI | 36 viviendas VPO
Seleccionado entre las primeras 22 propuestas de 170 presentadas
Fent Poble. El lema del proyecto se basa en el entendimiento de que la comunidad se establece mediante el encuentro de todos los habitantes que pertenecen a ella. En la antigüedad la vida de los individuos del barrio de la Soledad, se basaba en el trabajo de la fábrica y las viviendas colindantes de los propios trabajadores. La vida se dibujaba en las calles y la gente compartía las viviencias del día a día. Proponemos así, la regeneración de estas dinámicas para promover nuevas maneras de vivir en un lugar que ha perdido su identidad, potenciando la memoria viva de la Soledad.

Se aborda el proyecto relacionándolo con el contexto urbano más próximo, el centro de la ciudad de Palma, y por extensión con la cultura, la arquitectura y la sociedad de la propia ciudad, no absorbiendo protagonismo con respecto al resto del barrio sino todo lo contrario, en un contexto urbano consolidado del que quiere formar parte sumando valor. De tal forma la inspiración a la hora de resolver los problemas que surgen durante la fase de proyecto se resuelven desde el estudio de todos los ejemplos de la zona a nuestra disposición: los patios, las calles, la vegetación, los materiales, incluso la forma en la que la gente se relaciona con la arquitectura. Todo tiene su origen y respuesta dentro del prop barrio de la Soledad.

Se aplican por lo tanto soluciones tradicionales y cotidianas para resolver el confort de las viviendas como el aporte de sombra, el uso de ventilación cruzada, la vegetación como tamiz climático, el empleo de cerámica como elemento constructivo... en detrimento con otras soluciones tecnológicas más eficientes a corto plazo pero con fecha de caducidad en una zona tan valida como Mallorca, con la particularidad de la humedad y brisa marina que aporta el viento del Embat.


La vivienda formaliza una arquitectura ordenada según el asoleamiento y los vientos predominantes perpendiculares a la costa, abriéndose y centrando su núcleo vividero permeable y diáfano en su fachada sur para recoger el calor en invierno y las corrientes de aire en verano (embat y terrat), y abriendo las estancias diurnas con una transversalidad que permite el aprovechamiento de las oberturas a lado y lado de la vivienda, favoreciendo también una ventilación cruzada. Las plantas se configuran de tal manera que la zona de servicios: cocina y baños se sitúa de maneracompacta y conjunta en el centro de la vivienda, para dejar una mayor flexibilidad y compartimentación al resto de espacios servidos.

La configuración de la cubierta del edificio está basada en la idea de generar espacios comunes que estimulen la vida en comunidad. Además la utilización de estos espacios para actividades del día a día como el el secado de la ropa genera un mayor confort para los individuos. El uso de la cubierta a dos aguas proporciona también un confort térmico en las plantas superiores, donde el calor se disipa más fácilmente por estratificación.